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lunes, mayo 23, 2005 

Teoría de la alfajorización

Los directivos de las grandes empresas saben perfectamente cuáles son nuestros deseos. En sus ordenadores poseen carpetas enormes dónde archivan los sueños y ambiciones de toda la población. Conocen al detalle costumbres y secretos de cada uno de nosotros. Los directivos de las grandes empresas son poderosos y manejan el mundo a su antojo. Esconden siniestros planes para aniquilarnos. Y cada vez están más cerca de conseguirlo.

Su forma de destruir no es el ataque frontal, sino la acción psicológica sobre el adversario. Bombardeos que actúan como generadores de atracción. Los directivos de las grandes empresas saben que la mejor forma de matar a la vaca es lograr que vaya solita al matadero. ¿Acaso no estamos en este planeta por culpa de uno que cayó en la tentación de probar aquella maldita manzana?

Todavía no nos dimos cuenta –y tal vez ya sea demasiado tarde-, pero los poderosos decidieron qué es lo que vamos a comer en el futuro. Muy pronto, nuestra alimentación se basará únicamente en alfajores. Todas las comidas se irán reduciendo hasta convertise en pequeñas esferas achatadas de tres capas. Mi discurso puede sonar paranoíco, pero sé de lo que hablo. Los científicos que trabajan para los villanos decidieron que el producto que mejor identifica a los argentinos es el alfajor. Sabemos que nació como un derivado de aquellos pastelitos que vendían las negras en la Revolución de Mayo. Y que luego fue tomando impulso con el auge del turismo a Mar del Plata durante la época de gloria del peronismo, gracias a la tradicional casa ”Havanna”.

Los empresarios convirtieron al alfajor un arma de guerra y después comenzaron a atacarnos para que sintamos deseo sobre él. Primero, inventaron los alfajores triples. Por el mismo precio, le agregaron una capa más de masa y otra de dulce. Para qué cambiar un producto tan arraigado, se habrán preguntado algunos. Pero todo tenía sentido en la lógica perversa de los dominadores. El concepto que seguían era que, al tener una dimensión mayor, cualquier alimento se podría alfajorizar.

Y eso están haciendo en este momento.

Todas las golosinas, con sus particularidades, sus detalles nimios y sus toques exóticos, se fueron convirtiendo en alfajor. Ahí vemos los chocolates Shot, Toffi, Milka y Milkybar, los bocaditos Bon o Bon y Cabsha, las galletitas Oreo, Sonrisas, Pepitos y Melba. El yogur Ser se convirtió en un increíble alfajor Light. Hay un alfajores con gusto a bizcochuelo, a lemon pie, con frutilla y crema. Y ya están planeando otros con gusto a chicle de menta y a caramelos masticables.

Las golosinas que no se adaptan al cambio desaparecen. ¿Alguien se acuerda del Tubby, de los Topolinos, de las Vaquitas o de las Mielcitas? Todas cayeron por culpa de la alfajorización del país.

Los empresarios saben lo que hacen. Sus avances son graduales. Primero imponen un producto en un sector del mercado. Más tarde, atacan hasta conseguir el dominio total. Muy pronto, veremos alfajores con gusto a milanesa, a choripán, a guiso de lentejas. Al principio sonará como una excentricidad, pero cuando nos querramos dar cuenta, toda nuestra alimentación estará regida por tres capas de masa.

Este es un llamado de atención para todos los argentinos. Es hora de que nos demos cuenta de qué país le estamos dejando a nuestros hijos. Todavía estamos a tiempo de cambiar. No permitamos que nos alfajoricen el futuro.

vico...sos un grosso...capturas lo peor y lo mejor de las personas y la sociedad que nos rodea...cuando sea grande...quiero ser como vos!!

Ya sos grande, Isabel. Es hora de que lo sepas..

Tampoco permitamos que nos "celularicen" el futuro. Por favor!

Hace poco comí un helado de gusto.... alfajor. Posta.

Ya lo dijo el filósofo de Melmac, Sir Gordon Shomway: "Si un sentimiento común puede unir al mundo este es el odio a los mimos". Hoy Vico añade su particular visión apocalíptica sobre otra cosa que nos hermana y que terminará matándonos. Yo- y esto es una decisión muy personal- firmaría ahora mismo terminar mis días intoxicado con un Maxialfajor Jorgito.
Gonzalo Javier Campos.

Me permito agregar un dato al brillante señalamiento del lic. Vico. Quiero advertirles a todos acerca de la peligrosa influencia de la alfajorización en el lenguaje y la naturaleza . Dado el curso de los acontecimientos, de aquí a tres o cuatro años nomás, todo "Jorge" será apodado indefectiblemente con el prefijo griego "alfa". "Alfajorcito" o "Alfajorgito" le van a decir. Así que señora, señor... Sepa a qué se arriesga al ponerle ese nombre a su hijo...
Y si ud. vive en el departamento mendocino de Guaymallén... Tenga cuidado... Dicen que los científicos planean reemplazar la Luna por un alfajor de chocolate blanco, solamente en esa zona y de aquí a tres o cuatro décadas. Es la campaña publicitaria que se viene.
El peligro es inminente y... escribir me dio hambre. Me voy a comer un alfajor.

No sólo es verdad lo que señalan mis amigos Vico y el enemigo de T.T.: ¡hay más!
Aparentemente habría un novísimo revisionismo literario.
La frase de Ortega y Gasset: "Argentinos a las cosas" estaría siendo alterada en todos los ejemplares conteniendo la mentada cita por la siguiente diatriba: "Argentinos a los alfajores".
También la célebre "La pelota no se mancha", dicha por el Diego pasaría a ser (modificándose todos los diarios de la época y sitios web por un decreto de necesidad y urgencia) "El alfajor de chocolate blanco no se mancha".
La obra de Freud "Psicología de las masas" se llamará de aquí en más "Psicología de los alfajores". Y así se la estudiará en las Universidades.
La lista es muy extensa y abarca la danza. Ya no se bailará el Merengue sino el Alfajor.
Pido expresa (¡qué bueno acampañar un alfajor triple con un cafecito expresso!) colaboración a observadores imparciales en la pesquisa de esta nueva vorágine idomático-gastronómica.

Saludo fervientemente la certera observación de mi amigo. No así, el brulote que lanzó inopinadamente mi enemigo.

De todas formas, quiero solidarizarme con la causa del lic. Vico. Para eso convoco a una manifestación en la calle "Jorge" Newbery con el fin de repudiar la alfajorización del mundo.
Adhieren Madres de Plaza de Mayo, Adolfo Pérez Esquivel, Roque Máspoli, Calcetín con Rombos Man, la ADT(asociación en defensa del turrón),Alfa Romeo, y siguen las firmas.

Sin más.

T.T

Un momentito, señor T.T. No se confunda. Yo soy el amigo de su enemigo y no su amigo personal.
Como diría un tierno pastor gastronómico, cuyo círculo íntimo estaba formado por alfajores redondeados de tercera marca: "con miga o sin miga... la comida es mi única amiga porque al menos pernocta un rato en mi estómago y si te he visto no me acuerdo, porque lo que importa es el sabor de la comida y lo que impooooortaaaaaa es el alfajor".
Me despido con la célebre frase del filoso filósofo contemporáneo Raúl Roque Máspoli: "El hombre es como un alfajor, tiene capas: cuanto más uno se adentra, más dulce es." Claro, eso porque los amigos de Máspoli eran buenos tipos... Aunque también se duda de su masculinidad...
¿Es cierto que Máspoli es amigo suyo, señor T.T.?

Quiero que sepa, señor amigo del enemigo de T.T, que los amigos de mis enemigos son mis amigos.

Y otro que también es amiguito mío es el señor Raúl Roque Máspoli, un verdadero prócer en el difícil arte de comer galletitas y alfajores.

AQUI, EN ESPAÑA, HAGGEN DAZS HA CAMBIADO EL HELADO DE COOKIES POR EL DE ALFAJOR DE CHOCOLATE BLANCO, Y EL DE DULCE DE LECHE AHORA SE LLAMA SÓLAMENTE HELADO DE ALFAJOR (LE AGREGARON PEDAZOS DE MASA). SE LO DIGO PARA QUE ANDEN CON CUIDADO.
USTEDES NOS LLAMAN GALLEGOS, NOSOTROS LES LLAMAMOS... ALFAJORES

Hola. Soy Raúl Roque Máspoli... Muchachos: qué placer leerlos escribir acerca de mi persona. No me extenderé en mi respuesta, pues justo me agarran con un "negro" entre mis dientes y un "blanco" en la mano izquierda. Más tarde, puede ser que diga algo... o me "clave" uno más... duro, muy duro y con marroc. Acerca de la frase: y bueh, piensen lo que quieran. ¡Alegría!

Quiero aclarar que yo nunca dije que el hombre era como un alfajor. Siempre sostuve que era como una cebolla, porque tiene capas y cuando uno se adentra en él, te hace llorar. Es cierto que mi frase vale más para las féminas, que son de contar historias lacrimógenas... Pero por favor, no me confundan con Roque Máspoli, creo que es un primo lejano que no veo.

Así que España ya se venden helados-alfajores. Eso demuestra a las claras que el mundo va hacia una alfajorización total. Hay que estar atentos.
Muchas gracias por leer desde tan lejos.

Con respecto al debate entre T.T, su enemigo y el amigo de su enemigo, lo única duda que me queda es: ¿a Maspoli le gustan los alfajores negros?

Soy Raúl Roque (Máspoli, se entiende), y confirmo que tanto "negros" como "blancos" son de mi agrado. Ahora, ¿alguien puede "comerse" un "negro" de 3 pisos? Mmmm... 3er piso... me suena, un morocho del tercer piso, esponjoso pero empalagoso. Eh... ¿en qué estaba? Ah, sí... puede ser que la frase fuera mía... un "hombre alfajor"... ¿no es ésa la gran meta final?

De acuerdo al exhaustivo análisis de los comentarios vertidos por el Sr. Raúl Roque Máspoli, me permitiría señalar que este sujeto estaría más cerca de comerse la galletita que el alfajor, que con tanto fervor menciona.

Apoyo la teoría de mi novia. De hecho, existe una conocida frase que podría avalar su teoría: detrás de todo gran alfajor hay dos o tres galletitas .

Salgo a la calle y veo cientos de carteles, cartelitos, cartelones con la leyenda: "LA EVOLUCION DEL ALFAJOR". Sin duda, Vico, lo suyo es premonitorio y grandilocuente.
Ahora bien, ese Roque Raúl, a quién le ganó? Es Máspoli que quién?

Aquí en Temuco, Chile, tenemos el famosísimo alfajor de ensalada de frutas. Y esa delicia gastronómica la inventamos nosotros, cachai argentinos presumidos.

Chico, tu escritura es deliciosa, no sé muy bien lo que el alfajor es, pero suena sabroso. desde Cuba te dejo un afecto grande
Ismael

Oye chico, tu dices no conocer el alfajor pero seguro que conoces los cubanitos... así que no te quejes.

Elián G.

Enjoyed a lot!
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no permitire q hablen mal de tan noble golosina!!! te voy a agarrar en un callejon oscuro y te voy a hacer tragar 15 alfajores fulbito y nunca mas vas a despertar de la sobredosis de tan asquerosa porqueria!!!
ahora en serio, entiendo tu punto, y estoy bastante de acuerdo, de todas maneras adoro los alfajores, de hecho tengo un blog sobre ellos
losalfajores.blogspot.com

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