Blue
Encender un fósforo. Rescatar alguna escena de la infancia más remota, por ejemplo, el día en que un compañero de la escuela te pegó una paliza y tuvieron que llevarte al hospital. Intentar que vuelvan esas lágrimas. Pensar que todavía no pasó lo peor. Imaginar que tu compañero de escuela ahora está con ella. Ya es grande, pero igual tiene puesto un delantal blanco. Se ríe. Querés pegarle, aunque sabés que corrés el riesgo de terminar muerto.
Tirar el fósforo. Caminar y sentir los pies sobre la despareja superficie de la arena. Intentar alguna metáfora al respecto. Entrar a un bar y pedir vino de la casa. No mirar el televisor ni preguntar cómo va el partido. Escribir que la distancia te sirvió para darte cuenta de muchas cosas. Tachar lo escrito. Mandarte un vaso de un tirón. Escribir que la distancia te sirvió para darte cuenta de tus errores. Escribir que se merecen una oportunidad y que nada en el mundo es tan potente como el amor que sentís. Leer y releer lo que está escrito.
Terminar el pingüino y dar la vuelta tímidamente ante el grito de gol. Volver al hotel, caminando bajo la lluvia por el medio de la calle. Sentir que el agua purifica. Decidir que la carta será enviada al día siguiente a primera hora. Llegar mojado, recostarse, abrir un libro en cualquier página y leer una frase al azar. Por ejemplo: ”Lo que Julio quería decir era que la injusticia se había cometido con nosotros”. Detenerse en por qué fue elegida esa frase y no otra.
Sacarse la ropa y mirarse, desnudo, al espejo. Preguntarse dónde está el alma. Prender la tele. Escuchar un debate sobre la posibilidades del crecimiento del comercio exterior. Cómo integrarse en un bloque regional con Brasil. Dormirse. A la mañana siguiente, ducharse, vestirse y releer por última vez la carta. ¿Nada es tan potente como el amor que sentís? Guardarla entre las páginas del libro y salir a desayunar. Conversar con el mozo del bar. Comentar algo sobre el partido. Comprar un boleto de vuelta. Hacerle una broma a la chica que vende el pasaje. Volver a la playa. Es una mañana de sol.